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Auténtica duerina, es en Peso da Régua donde nació, vive y tiene su estudio la artista Rute Carlos.
Su trayectoria académica está marcada por una dualidad, que comenzó en la Literatura y la llevó a la Informática, pero fue su impulso creativo y su fascinación por la Pintura lo que la condujo al Diseño de Interiores y las Artes Visuales.
Afirma que es en la pantalla donde se expresa lo que las palabras no pueden decir y
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Auténtica duerina, es en Peso da Régua donde nació, vive y tiene su estudio la artista Rute Carlos.
Su trayectoria académica está marcada por una dualidad, que comenzó en la Literatura y la llevó a la Informática, pero fue su impulso creativo y su fascinación por la Pintura lo que la condujo al Diseño de Interiores y las Artes Visuales.
Afirma que es en la pantalla donde se expresa lo que las palabras no pueden decir y donde la libertad encuentra su propósito.
Las figuras que crea no son personas; son arquetipos emocionales y campos de batalla donde la identidad se negocia, se fragmenta y se expone. Su arte rebelde es una ventana que se abre sin miedo y, lejos de conformarse con las convenciones, desafía los límites de la expresión.
A lo largo de los años, ha explorado y reinterpretado diferentes formas de representar la realidad, con un enfoque único que fusiona la tradición de la pintura con las nuevas tendencias contemporáneas.
La artista que perpetúa las crónicas de sus viajes en sus obras, nos deja la promesa: “Un día pintaré el cielo”.
Una declaración metafórica que resume su creencia de que a través del arte, ¡todo es posible!
Las obras de Rute Carlos reflejan una estética intensa y sensible que explora los límites de la emoción humana. Utiliza técnicas mixtas, a menudo combinando acrílico, pastel al óleo y pintura al óleo para crear texturas ricas y contrastantes.
Las composiciones capturan al espectador a través de una exploración del color, la forma y la emoción, utilizando una técnica de pinceladas fuertes y gestuales.
Cada trazo de su pincel es intenso y evocador. Representa la lucha interior, la belleza pura y la complejidad de la experiencia humana.
Su paleta de colores es atrevida e invita a una experiencia inmersiva sin filtros.
El artista cree que la pintura es una forma de lenguaje universal, capaz de trascender el tiempo y el espacio.